En diciembre del año pasado me hice de una computadora AMD Athlon 64 3000+. Para el día de hoy es una máquina AMD Athlon 64 3400+ de la cual he tenido excelentes resultados.
Originalmente, la máquina tenía una tarjeta madre Abit KV8 MAX3 que hizo mi delicia los primeros días; pero con la nueva tecnología HyperTransport 2.0 (con una tasa de transferencia de 2GHz), no pude soportar la tentación de tener una nueva Abit KV8 Pro.
El cambio lo hice hoy. Fue un paso sencillo, aún cuando Windows XP tosió un poco. La ventaja es que ambas tarjetas madre se basan en el conjunto de chips VIA K8T800, aún cuando el de la segunda tarjeta es el modelo Pro. Así, Windows XP no tuvo que hacer más que reconocer los nuevos dispositivos y ya, a trabajar. De hecho, si hubiera utilizado otra marca de tarjeta madre, tampoco hubiera tenido mayor problema si el conjunto de chips es VIA.
Cuando sí pueden encontrarse problemas serios, es cuando se pasa de una tarjeta madre con un conjunto de chips a otra con otro conjunto de chips diferente. Por ejemplo, si la tarjeta madre tuviese un conjunto de chips nVidia nForce3, y la nueva uno VIA K8T800, es probable que 1) Windows (o el sistema operativo que sea) no arranque o 2) Windows (o el SO que sea) dé problemas durante su funcionamiento. En cualquier caso, siempre será necesario reinstalar el sistema operativo.
En el caso de la versión de Windows XP, que estoy utilizando, le aplicaré el Service Pack 2 y haré algunas pruebas para verificar qué tan bueno es. Aquí mismo publicaré los resultados.
Originalmente, la máquina tenía una tarjeta madre Abit KV8 MAX3 que hizo mi delicia los primeros días; pero con la nueva tecnología HyperTransport 2.0 (con una tasa de transferencia de 2GHz), no pude soportar la tentación de tener una nueva Abit KV8 Pro.
El cambio lo hice hoy. Fue un paso sencillo, aún cuando Windows XP tosió un poco. La ventaja es que ambas tarjetas madre se basan en el conjunto de chips VIA K8T800, aún cuando el de la segunda tarjeta es el modelo Pro. Así, Windows XP no tuvo que hacer más que reconocer los nuevos dispositivos y ya, a trabajar. De hecho, si hubiera utilizado otra marca de tarjeta madre, tampoco hubiera tenido mayor problema si el conjunto de chips es VIA.
Cuando sí pueden encontrarse problemas serios, es cuando se pasa de una tarjeta madre con un conjunto de chips a otra con otro conjunto de chips diferente. Por ejemplo, si la tarjeta madre tuviese un conjunto de chips nVidia nForce3, y la nueva uno VIA K8T800, es probable que 1) Windows (o el sistema operativo que sea) no arranque o 2) Windows (o el SO que sea) dé problemas durante su funcionamiento. En cualquier caso, siempre será necesario reinstalar el sistema operativo.
En el caso de la versión de Windows XP, que estoy utilizando, le aplicaré el Service Pack 2 y haré algunas pruebas para verificar qué tan bueno es. Aquí mismo publicaré los resultados.
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