Una generación de débiles visuales

Con profundo pesar cada vez me voy dando cuenta el profundo daño que hace el ahorrarse un dinero sin medir las consecuencias. Cada vez soy más testigo de niños que son expuestos a pequeñas maquinitas con monitores diminutos y con capacidades de cómputo mínimas, por pensar que los niños no necesitan nada más.

Los diminutos monitores están haciendo serios estragos en los ojos de los niños. Las pequeñas computadoras, la mayoría de ellas llamadas "Netbooks" y otras más que son otorgadas sin ninguna conmiseración como Compañeros de Clase, poco o nada pueden hacer para satisfacer las reales necesidades de cómputo de un niño, pero sí hace mucho por dañar seriamente la vista de sus usuarios y poner en serios aprietos las necesidades que REALMENTE tienen los niños de una computadora moderna.

Seamos serios y analíticos: Para nosotros, como adultos, tal vez una netbook o una máquina diminuta sea un buen compañero de viajes para reducir el peso que significa una computadora de tamaño completo. Ojo, que ese tipo de máquinas se pretenden más como uso adicional, que como enfoque de uso productivo único. Lo mismo pasa con las tablets, cuya funcionalidad satisface algunas necesidades, pero donde el tamaño de la pantalla y el espacio de almacenamiento difícilmente puede permitir realizar completos y complejos trabajos (incluso, escolares). Ambos son complementos de un equipo de cómputo completo.

Si seguimos ofreciendo a nuestros niños pequeños equipos de cómputo, con letritas diminutas donde necesiten forzar la vista para poder leer, terminaremos con una generación de serios débiles visuales tan solo porque en algún momento nos han metido la idea de que para un niño una maquinita de esas es suficiente.

Al contrario, los niños buscan mucho mayor poder que los adultos. Los niños requieren de pantallas grandes y coloridas. Requieren de mayores capacidades en sus equipos que nosotros, como adultos. ¿Por qué? Simple, porque para ellos la computadora es parte de su entorno, y la manejan con cada vez mayor maestría y para mayor cantidad de cosas que nosotros. Su imaginación vuela cuando la máquina no se las limita (por tamaño, espacio o capacidad). Tienen la facultad de hacer maravillas con la máquina y para ello se requiere mucho más potencia que la que nosotros hemos querido creer que necesitan. Solo hay que acercarse a los niños y preguntar. Reduzca la posibilidad de que su hijo tenga serios problemas de la vista (y de autoestima). Es mejor una máquina con un monitor grande y mayor potencia de cómputo. Su hijo se lo agradecerá. ¡Nos seguimos leyendo!

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Toshiba Satellite T215-SP1004M

Consecuencias de la falta de mantenimiento en el equipo de cómputo

Normalización de bases de datos (Parte 6 y última): Quinta y sexta formas de normalización (5NF) (6NF)