Paquetes ofimáticos: En pro de la productividad

Históricamente, los paquetes o suites ofimáticos han sido un punto primordial para la productividad en una computadora. En general, un paquete ofimático (que también se conoce como paquete de software de oficina o paquete de productividad) es una colección de programas de productividad que serán utilizados con ese fin. Los componentes, por lo general, se distribuyen en conjunto, y tienen una interfaz consistente, y generalmente pueden interactuar entre sí (en algunas ocasiones, de maneras en que el sistema operativo subyacente normalmente no permitiría). Los paquetes ofimáticos constan, por lo general, de un procesador de textos y una hoja de cálculo, aunque cada vez es más común que integren generadores de presentaciones, lectores de correo electrónico y bases de datos.

Este tipo de aplicaciones fueron las que convirtieron a la computación personal en un artículo de consumo, muy particularmente empezando con la hoja de cálculo Multiplan y el procesador de textos WordStar, ambos en la década de los años 80. Durante finales de la década de los años 80 y principios de los 90, Lotus 1-2-3 y WordPerfect se convirtieron en los estándares de facto y, sin embargo, hoy el estándar es Microsoft Excel y Microsoft Word. De hecho, hay una enorme cantidad de personas que creen que el paquete ofimático de Microsoft es el único que hay disponible para la productividad, pero, en realidad, hay más, varios más. Hoy quisiera ocupar mi espacio para hablar de distintas opciones ofimáticas que hay en el mercado y que podrían signarse como excelentes alternativas para la productividad en general (y para distintas necesidades). Tal vez una buena noticia es que, en la actualidad, los paquetes ofimáticos almacenan información en formatos propios, pero también en formatos compatibles que pueden ser compartidos con otras versiones de programas. Así, las opciones quedan al albedrío propio:

1) Microsoft Office (http://office.microsoft.com)

Éste es el paquete, en la actualidad, más utilizado y más conocido de todos los que hay disponibles en el mercado. Incluye, en sus distintas versiones, procesamiento de textos (Word), hoja de cálculo (Excel), generador de presentaciones (Power Point), base de datos (Access), lector de correos (Outlook) y varias otras herramientas adicionales para facilitar la productividad (como Microsoft OneNote). Incluye muchas herramientas de corrección y de los diccionarios mejor actualizados para el idioma español. En la actualidad, es generador del estándar para documentos, así como para las interfaces visuales.

2) Corel WordPerfect Office (http://apps.corel.com/lp/wpo/)

Durante algún tiempo, WordPerfect estableció el estándar en creación y manipulación de documentos. El mismo Microsoft Word necesitaba luchar por ser compatible con comandos y formatos de WordPerfect, hasta que empezó a ocupar el lugar de privilegio. WordPerfect Office fue adquirido por Corel y en la actualidad tiene una penetración limitada en el mercado. Sin embargo, integra toda la potencia de un paquete ofimático, con procesamiento de textos (WordPerfect), hoja de cálculo (QuattroPro), generador de presentaciones (Corel Presentations), base de datos (Paradox), lector de correos (Mozilla Thunderbird for WordPerfect Office), y algunas otras herramientas adicionales como diccionarios y administrador de contactos. Podría ser una buena alternativa.

3) IBM Lotus SmartSuite (http://www-01.ibm.com/software/lotus/products/smartsuite/)

Lotus 1-2-3 fue, durante varios años, el regidor de las hojas de cálculo en el entorno de MS-DOS. Con la llegada de Windows 3.0, Lotus 1-2-3 empezó a perder popularidad en favor de Microsoft Excel. Sin embargo, durante bastante tiempo la funcionalidad de Lotus 1-2-3 era la que regía en las hojas de cálculo en general. Lotus SmartSuite fue, para mí, el mejor paquete ofimático de la época, y el que utilicé durante mucho tiempo. Con el dominio de Microsoft Office, Lotus SmartSuite perdió fuerza, al punto de que la empresa fue adquirida por IBM. Con el apoyo de este gigante computacional, se esperó un renacimiento de Lotus SmartSuite, y, sin embargo, no ha sido así. Este paquete ofimático no ha avanzado de la versión 9.8 que fue liberada hace algunos ayeres (allá por 2008), pero puede funcionar sin problemas en recientes versiones de Windows (actualmente, en Windows 7 tanto de 32 como de 64 bits). Aunque aun conserva muchas de las grandiosas funcionalidades que me hicieron seleccionarla como el mejor paquete ofimático, ciertamente se pierde en algunos puntos de compatibilidad y funcionalidad. Integra procesamiento de textos (WordPro), Hoja de cálculo (Lotus 1-2-3), generador de presentaciones (Freelance Graphics), Base de datos (Approach) y organizador de contactos (Organizer), entre otras herramientas como Lotus SmartCenter (una barra de herramientas muy interesante) y Lotus ScreenCam (un grabador de actividad de la pantalla). Aun tiene su corazoncito.

4) SoftMaker Office (http://www.softmaker.com/english/)

Interesantísimo paquete ofimático que ha generado distintas versiones para distintos tipos de necesidades. Estos paquetes ofimáticos incluyen procesador de textos (TextMaker), hoja de cálculo (PlanMaker), generador de presentaciones (SoftMaker Presentations), y lector de correos (eM Client Professional). Incluye automatización mediante una versión de BASIC y alguna funcionalidad adicional. Lo más interesante es que este paquete ofimático también se encuentra disponible para Linux, Windows CE y Windows Mobile, con vistas a que aparezca alguna versión para Android. Cuenta con una gran compatibilidad con el Office de Microsoft, así como formatos estándar y abiertos. Una gran alternativa para la productividad.

5) LibreOffice (http://www.libreoffice.org)

Este paquete ofimático se derivó de la compra de Sun por Oracle, donde un grupo de desarrolladores de OpenOffice se separaron del código original y generaron esta nueva instancia libre. LibreOffice, a diferencia de las otras opciones, es una versión libre y abierta, disponible gratuitamente. Incluye interesantes capacidades, todas aportadas por la comunidad GNU y de Software Libre. Integra procesamiento de textos (Writer), hoja de cálculo (Calc), generador de presentaciones (Impress), base de datos (Base), y algunas otras herramientas como Draw, para generar dibujos, y Math, como editor de ecuaciones. LibreOffice puede complementarse con Mozilla Thunderbird para leer correos (de una forma bastante acertada), entre otras herramientas libres, disponibles en la telaraña mundial. Existen versiones tanto para Windows, como para Linux y Mac.

6) Apache OpenOffice (http://www.openoffice.org)

Ésta es la base de LibreOffice, solo que ahora ya no está auspiciada por Sun u Oracle, sino por la comuidad de Apache, misma que está en proceso de desarrollo de una nueva versión. Aparentemente, las comunidades de LibreOffice y OpenOffice están en muy cercano contacto y, tentativamente, las actualizaciones generadas en una versión podrán disfrutarse en la otra (el tiempo lo dirá). Su composición es exactamente la misma que la de LibreOffice, con la única diferencia del nombre, logotipo y la adición de una versión para el sistema operativo Solaris.

Existen otras opciones ofimáticas. Algunas de ellas son:

• Calligra (http://www.calligra.org). Paquete ofimático gratuito y libre basado en el KOffice, y que pronto empezará a liberar versiones para Linux y Windows, entre otros.
• Kingsoft Office (http://www.kingsoftstore.com/). Paquete ofimático que ofrece versiones gratuitas y con costo, tanto para Windows como para Linux y Android. Parte de una iniciativa china.
• Ability Office (http://www.ability.com/). Otra opción ofimática de bajo costo para hacer documentos que sean compatibles con Microsoft Office.
• CellFrame Office (http://www.celframe.com/office). Opción ofimática de bajo costo totalmente compatible con Microsoft Office. Aunque la última versión apareció en 2008.

No hay que dejar de lado las opciones ofimáticas disponibles en la Nube, como Google Docs (http://docs.google.com) y Microsoft Office 365 (http://office.microsoft.com), entre otros.


Así, hay más de una versión ofimática en el mercado, de manera que se pueda elegir de alguna de ellas la que mejor se adapte a las necesidades personales, y al presupuesto. Es mejor conocer las opciones que hay para, así, evitar la piratería y los riesgos que esta lleva. ¡Nos seguimos leyendo!