La configuración de la computadora

Un sistema bien configurado y afinado es mucho mejor que estar adquiriendo computadoras por la idea de que el hardware es el único culpable de la lentitud o agilidad de un equipo. En realidad, la configuración del sistema operativo es un asunto delicado que puede significar la diferencia entre una buena capacidad de respuesta, y una terrible experiencia de cómputo.

Para empezar, es muy recomendable que en un equipo NUEVO, se tenga un sistema operativo NUEVO. Es decir, si se está usando algún sistema operativo de Microsoft, lo mejor es utilizar el sistema operativo actualizado (como Windows 7), que mejor comprenderá al nuevo hardware, en lugar de utilizar vetustas versiones con la idea de una mayor estabilidad. Si se está usando algún sistema operativo GNU, como Linux, también es muy recomendable obtener la novísima distribución y versión que haya en la red (por ejemplo, Ubuntu Linux 10.10). Es decir, hoy es mucho mejor (y más ecológico) utilizar Windows 7 y Ubuntu Linux (y en su momento, Windows 8 o la venidera versión de Ubuntu Linux [o la distribución que utilice]) que utilizar Windows 2000, Windows XP o Ubuntu 4.10 (siempre y cuando la computadora date de 2006 para acá, y en el caso de Windows 7 o en las nuevas versiones de Ubuntu, que date de 2008 para acá). Hay algunos detalles que deberá observar mínimamente la computadora para que sea REALMENTE aprovechada por estos sistemas operativos, como son:

  • Procesador x86 de 64 bits de doble núcleo al menos.
  • Chip gráfico DirectX 10.x u OpenGL 3.x (puede ser integrado a la computadora, o por separado en una tarjeta de vídeo) que ofrezca más de 40GFLOPS.
  • Chipset con amplio ancho de banda (evitar FSB, y menos aún con frecuencias de reloj menores a 10.6GB/s o 1333MHz).
  • 4GB de memoria RAM. Si es DDR3, mínimo de 1066MHz (1333MHz recomendado), si es DDR2, mínimo de 800MHz en modo Dual Channel, ambos en modo Dual Channel.
  • Disco duro Serial ATA de 3Gb/s (preferentemente de 320GB o más de espacio, por aquello de la multimedia).
  • Fuente de energía que no sea mayor de 300W reales (y que realmente permita la configuración de la máquina con 2 discos duros, una tarjeta de vídeo y 8GB de RAM). Eso, por el ahorro de energía.
Hay opciones que permiten conectar 2 monitores, con salidas DVI, HDMI y Display Port (para eso de la Alta Definición), así como con la capacidad de conectar hasta 4 monitores (con ayuda de otra tarjeta gráfica) y hacer arreglos RAID 0, 1, 0+1, 5 y 10 ya integrado en su chipset. Esas son características interesantes que agregan valor a la computadora.

Déjeme comentarle que a lo sumo, un usuario estándar estará requiriendo de procesadores de 3 núcleos y ya. Con 2 núcleos se tiene una capacidad de respuesta multitarea súmamente interesante (la multitarea es lo más que se puede obtener con procesadores multinúcleo, dado que es muy complejo desarrollar aplicaciones de múltiples subprocesos o multithreading, de manera que difícilmente un usuario final podría saturar los servicios de un procesador de 3 núcleos). Más de 3 núcleos serían necesarios para usuarios especializados en desarrollo de aplicaciones, diseño gráfico CAD, "renderizado", virtualización exigente, y cosas por el estilo. Para el grueso de los usuarios, dos núcleos (y, cuando mucho, tres) serían más que suficiente.

La anterior máquina "mínima" ya sería un verdadero avión. Pero muchas veces el gran problema es la configuración del sistema operativo (hay quienes nomás instalan, pero no se ocupan de ajustar los detalles para obtener el mejor rendimiento). Una parte de ese ajuste, insisto, es el uso de sistemas operativos nuevos, dado que tienen núcleos (o kernels) que comprenden mejor el funcionamiento de una máquina con procesadores multinúcleo (o multicore) y GPUs (o procesadores gráficos). Un Windows XP nació antes que hubiera procesadores multicore y no está muy conciente de las GPU, por lo que su máquina se vería muy desperdiciada por ello.

Además de los ajustes en el BIOS o EFI (actualización, procurar activar las opciones de ahorro de energía [Cool'n'Quiet o EIST, C1E, etcétera], el adecuado reconocimiento de los núcleos, el adecuado reconocimiento de los discos duros, de la velocidad y consumo de energía de la memoria, activación de la virtualización, etcétera), el sistema operativo debe ser adecuadamente ajustado al tipo de hardware donde esté instalándose:
  • Obtenga los controladores (o drivers) actualizados desde la página Web del fabricante del componente. Por ejemplo, si tiene una tarjeta madre Asus, visite www.asus.com y obtenga los controladores actualizados, así como el BIOS actualizado. Si tiene una tarjeta de vídeo Radeon HD, visite http://game.amd.com y obtenga los controladores actualizados de su tarjeta de vídeo. Y haga lo mismo con los diferentes componentes de su máquina. Normalmente, los CD que se incluyen con los componentes tienen controladores anacrónicos, de manera que es mejor instalar los actualizados que aparezcan en la página Web del fabricante.
  • Haga las actualizaciones de su sistema operativo (en el caso de Windows 7, instale las actualizaciones con Windows Update, con Ubuntu, visite el Administrador de Actualizaciones y obtenga todas las concernientes). Eso requerirá de algo de tiempo y de una buena conexión a Internet. :)
  • Instale algún programa que le permita detallar parte de la configuración. Para ello, en Windows le recomiendo TweakNow PowerPack 2010 (que puede obtener gratuitamente desde www.tweaknow.com) para detallar algunos aspectos como el uso del caché del procesador, el administrador de memoria, y algunas otras cosas más. El programita de marras tiene varios aspectos que, incluso, permiten configurar los detalles OEM de la máquina. Estoy seguro que este programita, cuya captura de pantalla aparece en el contexto, le ayudará a detallar varios aspectos (incluso, inhibir programas que se cargan de inicio en el sistema y que tontamente retrasan el arranque).
Finalmente, en cuanto a la configuración del consumo de energía, es importante configurar a Windows 7 o Windows Vista en el modo "Equilibrado" (Balanced), para que tenga la mejor relación entre rendimiento y ahorro de energía. Difícilmente verá algún cambio si le pone la configuración "Alto rendimiento" (High Performance), más allá de que empiece a experimentar calentamiento del sistema. En GNU/Linux también hay aplicaciones que permiten establecer el sistema en modo OnDemand, como el CPU Monitor. Seleccione ese modo cuando use GNU/Linux y su ahorro de energía también se pondrá en evidencia. En Windows XP, el modo adecuado se encuentra en la Opciones de energía en el Panel de control. Hay que seleccionar la opción "Administración de enegía mínima" una vez que se hayan instalado los controladores de AMD o de otras tecnologías en el sistema.

Espero que las anteriores recomendaciones le sean útiles para tener un sistema mejor configurado y aprovechar, de una vez por todas, las verdaderas ventajas de su compra. Lo anterior se aplica tanto a PCs como a equipos portátiles. ¡Nos seguimos leyendo!

Comentarios

Muchas gracias, Jaime. Ésa es la intención, ayudar. :)

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